Refranes

SOBRE EL PODER DEL DINERO

El burro cargado de oro
tiene el rebuzno más sonoro.

SOBRE LA TIMIDEZ

Hombre pusilánime,
ni para sí ni para nadie.

Quien a poco se atreve
en aguas llueve.

Quien tiene vergüenza
ni come ni almuerza.

Quien no se aventura
no pasa la mar.

Hombre encogido,
siempre desvalido.

El mundo es para los osados,
no para tímidos ni callados.

SOBRE EL TIEMPO

Año de nieves,
año de bienes.

En enero,
nota la jornada el arriero.
A últimos, no a primeros.

Por san Blas
las cigüeñas verás.

Febrero, frío o templado,
pásalo arropado.

Por febrero
florece el romero.

Marzo ventoso,
abril aguanoso
sacan a mayo
florido y hermoso.

El criado:
¡Agua, Dios!,
y venga mayo,
que aunque llueva o no
estoy "igualao" de por año.
El amo:
Pues ¡agua, Dios!,
y mayo venga,
que aunque llueva o no
tienes que ir a por leña.

Como marzo revuelve el rabo,
no queda oveja con pelleja
ni pastor enzamarrado.

En abril,
aguas mil.

En abril
siestas has de dormir;
y en mayo,
aunque no quiera el amo.

Hasta el cuarenta de mayo
no te quites el sayo.

En el mes de san Juan,
al sol se cuece el pan.

Por san Juan,
revisa tus higueras:
si no encuentras higos,
encontrarás brevas.

En las tarde de agosto,
ni por leña al monte
ni por agua al pozo.

En agosto,
el frío en el rostro.

SOBRE LA PRUDENCIA

Allá donde fueres,
haz lo que vieres.

Al buey callado
le llaman sabio.

El que mucho habla
mucho yerra.

Más vale pájaro en mano
que ciento volando.

Quien mucho corre
pronto para.

Agua que no has de beber,
déjala correr.

SOBRE LA PRECAUCIÓN

Más vale un "por si acaso"
que un "no pensé".

Burro prevenido
vale por dos.

No dejes para mañana
lo que puedas hacer hoy.

SOBRE LA MENTIRA

La mentira
tiene las patas muy cortas.

Se pilla antes al mentiroso
que al cojo.

La mentira y la verdad
no pueden vivir en paz.

La mentira envilece al que la usa
y hace indigno de perdón al delincuente.

SOBRE LA AVARICIA

El que mucho abarca
poco aprieta.

La avaricia
rompe el saco.

OTROS

A la tercera
va la vencida.

A burro muerto,
la cebada al rabo.

A lo hecho,
pecho.

Al césar lo que es del César
y a Dios lo que es di Dios.

Casa con dos puertas
mala es de guardar.

En casa del herrero,
cuchillo de palo.

¿Dónde irá el buey
que no are?

Quien bien te quiere
te hará llorar.

Quien a buen árbol se arrima
buena sombra le cobija.

El hombre y el oso,
cuanto más feo,
más hermoso.

La mujer compuesta
aleja a su hombre de otra puerta.

Piensa el ladrón
que todos son de su condición.

A quien madruga
Dios le ayuda.

No por mucho madrugar
amanece más temprano.

Aunque la mona se vista de seda
mona es y mona se queda.

A palabras necias,
oídos sordos.

Perro ladrador,
poco mordedor.

Nunca llueve
a gusto de todos.

El mejor escribano
echa un borrón.

Cuando las barbas de tu vecino veas pelar,
echa las tuyas a remojar.

La zorra cambia de pelo
pero no, de costumbre.

Más vale pájaro en mano
que ciento volando.

Cuando el tonto coge la linde,
la linde se acaba
pero el tonto sigue.

El que da pan a perro ajeno
pierde pan y pierde perro.

Quien tiene paz y alegría
duerme bien de noche
y trabaja bien de día.

Quien siembra vientos
recoge tempestades.

Dime con quién andas
y te diré quién eres.

A caballo regalado
no le mires el diente.

No es más limpio el que más limpia,
sino el que menos ensucia.

De tal palo,
tal astilla.

A buen entendedor
pocas palabras bastan.

Dime de qué presumes
y te diré de qué careces.

Quien mal anda
mal acaba.

Ojos que no ven,
corazón que no siente.

Al mal tiempo,
buena cara.

Donde manda capitán,
no manda marinero.

A río revuelto,
ganancia de pescadores.

Nunca es tarde
si la dicha es buena.

Haz bien
y no mires a quién.

Al perro flaco
todo se le vuelven pulgas.

Unos tienen la fama
y otros cardan la lana.

La pela buena o mala
a los ocho días iguala.

Los hijos y los maridos
por las obras son queridos.

Perro parado,
mal pensamiento.

Al santo que está "enfadao"
con no rezarle estamos "acabaos".

Modista sin dedal
cose poco y cose mal.

El burro que más trabaja
más rota tiene la albarda.

Sarna con gusto
no pica.

¿Dónde va Vicente?
Donde va la gente.

La mejor defensa
es un buen ataque.

Perro porfión
saca mendrugo.

Es de bien nacido
ser agradecido.

Tres jueves hay en el año
que relumbran más que el Sol:
Jueves Santo, Corpus Christi
y el día de la Ascensión.

El que come queso sin raspar
come mierda sin pensar.

El que se da por aludido
es que entre ellos está comprendido.

El que se pica
ajos come.

El que escucha
de su rabo oye.

En el país de los ciegos,
los tuertos son reyes.

No hay peor ciego
que el que no quiere ver.

La vaquita mansa se mama su teta y la ajena,
la brava no se mama ni la suya propia.

Nadie es profeta
en su tierra.

Cada maestrillo
tiene su librillo.

Nadie da duros
a cuatro pesetas.

Mal de muchos:
consuelo de tontos.

Mayo llegó
y aró quien aró.

Si culo veo,
culo quiero.

Tanto tienes,
tanto vales.

Obras son amores
y no buenas razones.

Buena gana de silbar al burro
cuando no quiere beber.

Cree el ladrón
que todos son de su condición.

Cría cuervos
y te sacarán los ojos.

De copiosas cenas
están las sepulturas llenas.

Ningún cagado
se huele.

Ver la paja en el ojo ajeno
y no ver la viga en el propio.

Preguntar no es forzoso,
responder sí lo es.

Para lo que me queda de estar en este convento,
me cago dentro.

Más da el duro
que el desnudo.

El que paga con la misma moneda
no es mal amigo.

Casa con dos puertas
mala es de guardar.

Aquellos polvos
traen estos lodos.

Vale más caer a punto
que rondar un año.

Dios ayuda
al que se ayuda.

No es oro
todo lo que reluce.

Moro viejo
no aprende lenguas.

No hay peor cuña
que la de la misma madera.

Del mal de tu vecino
no tengas gozo:
cuando el suyo es viejo,
el tuyo es mozo.